Denuncia ciudadana a actos de corrupción y la respuesta del SAT

Gran Angular | Raúl Rodríguez Cortés

El Sistema de Administración Tributaria respondió a la denuncia ciudadana publicada aquí el viernes pasado con el título Otra más de corrupción. Son tres puntos los que pide se precisen e informen Pedro Canabal Hermida, administrador Central de Comunicación Institucional del SAT, firmante de la carta. Los reproduzco y comento.

1. El ciudadano José Luis Moya denunció a través de este espacio que el SAT “compró o está por comprar 285 camionetas Pick Up Chrysler en 176 millones 130 mil pesos, cuando podría haberlas comprado en 115 millones 710 mil pesos o menos”. Además, compara la adquisición “con una reciente cotización entregada a Pemex Refinación el pasado 15 de octubre para la licitación SCBS-003/2010, en la que el costo más alto por el mismo vehículo es de 271 mil pesos a precio de flotilla y sin el equipamiento especificado”.

Respecto a tales asertos la carta del SAT asegura que consultó el portal del Sistema Electrónico de Contrataciones Gubernamentales (Compranet) y verificó que los vehículos adquiridos por Pemex “no cuentan con las mismas características, ni equipamiento, ni son para las mismas funciones de los requeridos por el SAT, por lo que no es posible realizar un comparativo”.

La carta, y aquí ya comento, confirma, de entrada, que la compra fue realizada. Y reconoce lo que aquí mismo dijimos, que las camionetas de Pemex no fueron adquiridas “con el equipo especificado”. Éste, según pudimos cotizar con diversos distribuidores, no es superior a 70 mil pesos. Entonces, si en la entrega anterior decía el denunciante que el costo para Pemex fue de 271 mil pesos por camioneta, podemos ahora sumar los 70 mil pesos del equipo para totalizar 341 mil pesos. Si a esa cantidad le aplicamos el IVA, tenemos que el costo por unidad hubiera sido de 396 mil pesos, inferior a lo pagado por el SAT.

2. La carta señala también que “el monto de la compra de las 285 camionetas a las que hace referencia la columna del viernes pasado, fue de menos de 154 millones de pesos, monto inferior al que se menciona en la nota”. En Compranet encontré, en efecto, que el importe de las partidas de la licitación 06101072-026-10 fue de 153 millones 587 mil 471 pesos. Pero en el recuadro correspondiente se especifica que el monto es sin IVA. De manera que si cerramos la cantidad en los 154 millones que dice el SAT y le cargamos la correspondiente tasa impositiva de 16%, obtendremos 24 millones 640 mil pesos más, que totalizan 178 millones 640 mil pesos, un poco más de los 176 millones que el denunciante dijo se pagó por las camionetas. Y si usted divide esos 178 millones de pesos entre las 285 camionetas obtendrá que cada una costó 624 mil pesos. Me parece, entonces, que esas son las cantidades correctas, a menos que el SAT no pague el IVA ni se obligue a sí mismo cumplir con esa obligación.

3. La carta aclara, asimismo, que “la convocatoria para la licitación de este proyecto se publicó el 9 de septiembre de 2010 y que la única propuesta recibida y que cumplió con las características solicitadas fue de la empresa Autoangar, SA de CV”. Es cierto, el SAT argumentó que las otras no cumplieron con las bases de la licitación. Pero muchos de los participantes que no recibieron respuesta a sus propuestas objetaron en una junta de aclaraciones que las especificaciones de camioneta y equipo estaban dirigidas a Chrysler y a Torretas Whellen, como fue denunciado ante la contraloría del SAT y en la Auditoría Superior de la Federación.

Uno de los participantes bateados de la licitación fue la distribuidora Ford Surman, que envió al denunciante Moya una copia de la cotización que presentó. En ella marca un precio de 520 mil 840 pesos ya equipada y con IVA incluido, precio inferior al pagado por el SAT. Otras cotizaciones de agencias de otras marcas consultadas por este reportero plantean un costo por camioneta, con todo y los impuestos, de 335 mil pesos; y el del equipo solicitado por 71 mil pesos, es decir, un total de 406 mil pesos, inferior también a lo pagado por el SAT.

En las bases de licitación hay un argumento recurrente: la exigencia de que la camioneta tenga una capacidad de carga de 700 kilos y eso, en efecto, sólo lo ofrece la camioneta de Chrysler. La pregunta es si el SAT requiere vehículos con mayor capacidad de carga que los de Pemex o los de la Policía Federal Preventiva.

Dice la carta del SAT que siempre ha actuado y actuará con transparencia. Si es así, no estaría de más que nos diera a conocer el expediente completo de lo que aquí se comenta.