Para reconocer que aún existe gente buena a pesar del daño a su patrimonio económico, moral y cultural. Hago uso de mi derecho de libre expresión conquistado con sangre, para objetar lo que me provoca el ambiente de Bicentenario y de la Revolución, asumido con cínica desvergüenza por las autoridades que nos malgobiernan, pues con su insensibilidad y una absoluta ignominia pretenden “festejar con nosotros no sé qué cosa”, cuando son causa de la descomposición social, pensando quizá que la tragedia de México nos es aún indiferente (aquí alguien dijo “los pueblos pagan caro el no saberse dar a respetar”), y qué verdad tan dura.
¿Seríamos mexicanos para celebrar? Que México:
-Ocupe el 1er lugar de América Latina con crecimiento cero, porque la política económica ni en términos cuantitativos ha dado resultado, donde pocos ganan todo y la mayoría ni lo más indispensable, porque el desarrollo no está planeado de acuerdo al interés nacional.
-Tenga 80 millones de mexicanos pobres, salario de 57.46 pesos y canasta básica que se ha triplicado. Y los impuestos aumenten.
-Importe casi el 50% de sus alimentos, porque el campo está abandonado por eso las modificaciones al artículo 27 constitucional como estrategia gubernamental.
Una tasa de desocupación de un 79%. Somos los reyes de la migración y de que muchos jóvenes hoy se encuentren sin futuro ni educación, (ni estudian, ni trabajan), exponiéndoseles a engrosar las filas de la delincuencia (Inegi).
-Teniendo abundantes recursos naturales aún estén en manos de extranjeros, a pesar de ser bienes públicos y que no paguen impuestos. Impongan valores empresariales de “competitividad” de “ excelencia y calidad”, de “integración al primer mundo” a costa del sufrimiento de la gente, del medio ambiente y de afectar el valor de la solidaridad y el amor al prójimo. Promuevan reformas laborales que afectan los derechos de los trabajadores, con la complacencia de las autoridades. ¿Nos permitirían hacer lo mismo en sus países?
-Ocupe los primeros lugares en inseguridad, corrupción (saqueo a Pemex), impunidad (Guardería ABC), en suicidios, obesidad, etc.
Hoy la edad de drogadicción ha bajado de 15 a 11 años, además de ser México un paraíso para pederastas y trata de personas.
-Y sus instituciones se encuentren secuestradas por quienes sirven a los intereses de los poderosos, imperando la corrupción. ¿Podemos celebrar algo?, cuando las razones de la lucha de Independencia y de la Revolución, fueron por la soberanía de un pueblo para ejercer su derecho a una vida digna, sin esclavitud (alimentación, salud, vivienda, vestido, educación, cultura), producto de su trabajo y como exigencia ante la desigualdad, que hoy en el año 2010 aún perdura.
Ahora nos corresponde la responsabilidad de hacer un cambio verdadero, hacer valer nuestros derechos, ya no es posible seguir pensando que nuestro destino natural sea nacer y morir pobres, no, porque no es así.
Existe la esperanza de tener un México más digno, más justo, más nuestro; un México donde los niños no anden con tristeza su camino; donde la voz de sus habitantes no sea más un lamento; un México donde nunca más un joven decida quitarse la vida porque no le encuentre sentido, y donde el nacimiento de un niño represente alegría, mucha alegría.
Y sí, este aniversario conmemorativo nos recuerda lo que en su momento hicieron grandes personajes de nuestra historia, lo cual debe servirnos de aliento.
Norma Meraz| elsiglodetorreon.com.mx
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