Peña Nieto y su “mandíbula de cristal”

miércoles, 8 de septiembre de 2010.

Carlos Loret de Mola|Historias de Reportero

“Ojalá que Enrique Peña Nieto sea el candidato del PRI a la Presidencia... tiene ‘mandíbula de cristal’”.

‘Así ha contestado a cercanos el actual secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, cuando le preguntan: ¿cómo ganarle al gobernador del Estado de México? Algunos de ellos lo han revelado a este reportero.

“Mandíbula de cristal” es un término que se aplica a aquel boxeador que no resiste un golpe en el mentón porque cae noqueado. ¿Hay algún expediente fiscal o bancario del político que hoy aparece en primer lugar de las encuestas rumbo al 2012 capaz de derribar a Peña Nieto? ¿Un folder de asuntos personales que puedan significar un misil político destructivo que lo descarrile? ¿El golpe será contundente, aniquilador, como a su antecesor, Arturo Montiel?

El secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, tiene muchas ganas de ser el próximo presidente de México. Los más recientes cambios en Los Pinos parecen alinearse a su favor; en especial, la salida de Patricia Flores, principal impulsora de las aspiraciones de Alonso Lujambio, secretario de Educación Pública. Tras su renuncia, quienes tomaron el mando del staff calderonista son, sobre todo, partidarios de Cordero en la lucha por la candidatura presidencial panista. Está en el interés del PAN y del gobierno federal que cuando arranque la carrera por la sucesión no haya un caballo “sobreadelantado”.

En ese mismo interés converge el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, quien ha ido ganando posiciones de poder y presión en el interior del PRD. Es él uno de los principales impulsores de una alianza PRD-PAN en busca de la gubernatura del Estado de México. El plan consiste en “bajarle los humos” a Peña Nieto por dos vías: ganándole la elección (lo que dejaría muy mal parado al mexiquense frente a los priístas de todo el país y complicaría, si no haría imposible, su postulación como candidato a la primera magistratura) y nombrando a un procurador que se dedique a escarbar en las cuentas del gobierno de Peña hasta encontrar números que lo pongan en problemas.

Ya sin contar los otros panistas, perredistas e incluso priístas cuyas aspiraciones pasan porque el gobernador de la entidad más poblada del país no mantenga los niveles de intención de voto que le siguen marcando las encuestas.

“Sin 2011, no hay 2012”. Así suele contestar Enrique Peña Nieto a quienes le preguntan de sus aspiraciones presidenciales. Se refiere a que primero debe ganar a favor del PRI la sucesión en el gobierno del Estado de México y luego pensar en Los Pinos.

Y hacia esa contienda están enfocadas las baterías.

Comentários:

Publicar un comentario

Agrega tu comentario

 
EL CAUDILLO PETROLERO © Copyright 2010